La "Dieta Mediterránea" es una práctica social basada en un conjunto de competencias, conocimientos y tradiciones que van del paisaje a la mesa y que conciernen, en la cuenca mediterránea, a las culturas, cultivos, recolección, pesca, conservación, procesamiento, preparación, cocción y sobre todo los métodos de consumo de la comida. Este cuerpo de conocimientos está asociado con el ritmo de un calendario estacional caracterizado por la naturaleza y los significados religiosos o rituales relacionados. La Dieta Mediterránea como estilo de vida, determinada por el clima mediterráneo, se manifiesta también a través de fiestas y celebraciones, eventos que se convierten en un lugar de gestos de reconocimiento mutuo, hospitalidad, cortesía, cordialidad, transmisión intergeneracional y diálogo intercultural.